HISTORIAS ROCAMBOLESCAS

San felipe neri y su oratorio

El convento de los Filipenses está anexo a la Iglesia de San Alberto, entrando en la judería sevillana por la Cuesta Rosario

Mi querido Don Pedro Fernández Cuesta, en su día, junto con Don Ángel eran sus únicos habitantes. Emilia les ayudaba con lo doméstico y  Mauricio cuidaba la entrada, el compás…

Ese soberbio edificio, lleno de rincones arrancados de otras épocas, aloja obras de arte de  inmenso valor.

Tuve la gran  suerte de pasar allí mucho tiempo restaurando lienzos enormes, habilitando el coro y la casita del portero, ( donde por cierto se podrían rodar espeluznantes películas de terror y escenas de casas de la España pre guerra civil).

Fue una época difícil, ( restaurar en solitario aquellos cuadros mastodónticos era ardua tarea, tuve que recurrir a unos trabajadores  de mi marido, para improvisar andamios y otros artilugios que  me permitieran acceder a todas las zonas que requerían tratamientos), pero mágica y maravillosa.

Subía cada día esa escalinata palaciega de mármol con ilusión y a veces, cuando todos salían y me dejaban sola , hasta con cierto miedo por que todo crujía, susurraba y las luces y sombras dibujaban siluetas enigmáticas

Hay mucho que contar, tanto sobre la aventura de restaurar en aquel lugar, como la historia de las obras que describen pasajes muy interesantes y las técnicas empleadas para devolver esplendores a pinturas desgarradas por el paso del tiempo

Lo iré narrando y dándoos  alguna pauta sencilla , para poder restaurar pequeños deterioros en vuestros cuadros o imaginería, pero …si no son pequeños, si son grandes desperfectos, por favor,¡ por lo que mas queráis,  dejádmelas a mi!

Este fabuloso óleo sobre lienzo, plasma un momento de la construcción de la CHIESA NOVA, sede de la Congregación del Oratorio

 

 

 

encamonada sobre tambor

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